jueves, 19 de abril de 2012

ADELANTO: La bruja y el cazador (Despertar IV) Primer capítulo.

—Chúpala. Con más fuerza.

Su voz, ronca y áspera por el aguardiente, rugían un sinfín de groserías.
Al fin y al cabo las dos mujeres con las que estaba teniendo sexo eran simples prostitutas. Le importaba una mierda ser un poco insolente.
La rubia, alta y exuberante, desnuda, salvo por los tacones aguja de doce centímetros que aún no se había querido quitar, se encontraba arrodillada ante él, practicándole sexo oral mientras la morena lo rodeaba por la espalda, dándole pequeños mordiscos calientes en el cuello.
Él no entendía por qué, pero podía oler la excitación de esas dos mujeres. Dedujo que fue un pequeño regalo de su resurrección.
Meses atrás, Andrés había sido llevado al pozo profundo de la muerte definitiva, salvo por un pequeño detalle, su sangre era parte de Amanda, cuando en un pequeño encuentro cercano ella había bebido de él, entonces, al encontrarse con Cassie, una bruja, pudieron traerlo a la vida nuevamente. Claro que, había sido por algo a cambio: la daga de Jade. Insistían que con ella podían resucitar al Jefe del clan de Lobos del hermano de Cassandra, Ian.  
Blah, blah, blah, era todo un jodido rompecabezas del infierno tratar de recordar toda la historieta. A Andrés le importaba un carajo, si le preguntaban.
Lo que le interesaba un poco era el hecho que, a pesar de tener su sentido del olfato mucho más desarrollado —ahora captaba algo más que olores y perfumes, los estados de ánimo de las personas—, era que no podía salir bajo la luz del sol. Él nunca se había imaginado lo terrible como la mierda que eso sería. Y lo era.
Estaba tan aburrido… tan condenadamente deprimido encerrado entre cuatro paredes todo el día. Hacía meses que no veía a nadie, bueno, salvo el pequeño inconveniente que tenía en el sótano. Pero eso era otra cosa.
Con su hermano Benjamín estaba todo demasiado flojo. Después de tantos siglos ahora resultaba ser que sus padres eran unos bastardos y que no sólo se habían consumido ellos mismos por su adicción a intercambiar su sangre, sino que lo habían matado a él también.
Bendita familia que tenía, al fin de cuentas. Nadie podía culparlo ¿o sí?

Con un rápido movimiento, se levantó del sillón de cuero del salón privado que estaba en la planta de arriba de su casa en la Isla del Vintén Lodge. Aquellas mujerzuelas estaban tan ebrias que apenas se darían cuenta que sus movimientos no eran humanos.

—Quítate —le exigió a la rubia que se la estaba mamando, la mujer obedeció sin protestar—. Tú. Ven aquí —ordenó a la morena—, ponte de espaldas.
La morena apoyó las rodillas sobre el sillón negro y recogió su pelo a un costado, para poder girarse unos grados y ver la belleza sobrenatural de aquel hombre que estaba a punto de follársela.
Andrés se colocó detrás de ella e hizo que la rubia se sentara al lado de su amiga. Había lugar para las dos. Demonios que había lugar. Sin embargo, él las prefería de otra forma.
—No. Así no. Tú te vas a poner debajo de ella —le dijo a la blonda.
La morena sin nombre se levantó apenas y dejó que su amiguita se sentara debajo de ella para luego ponerse a horcajadas sobre sus piernas.
Los sexos de las prostitutas se tocaron y empezaron a besarse. Andrés podía permitirlo, de hecho, estaba lo bastante excitado con esa situación.
Teniéndolas sentadas una sobre la otra, él parado tras la morena, agarró las caderas de la última con fuerza y la penetró sin siquiera avisar. 

6 comentarios:

  1. :O ANDRES PORQUE MIERDA NO ME ASES ESO A MII!! AJJA COMO SIEMPRE AMANDA! AMO LO QUE ESCRIBÍS CADA MÍNIMA LETRA! TE ADORO MUJER! :D

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  2. excelente!! Para cuando subes más?? me muero por seguir leyendo algo de la bruja y el cazador :)

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  3. OMGOSH"!!! es la primera cosa que leo de tu parte y es fenomenal..
    ¿entiendes? fenomenal!!!!!!!!!!!! quiero más.
    jajajajaja
    espero ver las otras historias.

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  4. quisiera saber si salio el ultimo libro? si salio me lo mandan a tefy_18_12@hotma...

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